VANG VIENG

Lo que hace unos años era un lugar de desfase donde lo normal era emborracharse, tomar zumos de setas alucinógenas, fumar petardos, meterse de todo menos miedo, y era frecuentado por “lo mejor” de cada país, ha pasado a ser un destino de coreanos, chinos, japoneses y algunos occidentales con Lonely Planet viejas y para nada actualizadas.

Después de leer algunos blogs diciendo que la naturaleza de los alrededores estaba guay, fuimos a pasar 3 días, ya que nos pillaba de paso hacia Vientián y no queríamos pegarnos otra paliza en la carretera. Personalmente, a nosotros no nos gustó este destino, ya que además de que Vang Vieng es un pueblo feo, montado para el turismo de masas que un día tuvo y donde lo poco que puedes hacer por tu cuenta, nos pareció bonito pero para nada del otro mundo.


TRANSPORTE


CÓMO LLEGAR E IRSE

Llegamos a Vang Vieng desde Luang Prabang en una minivan turística. Habíamos leído que el trayecto se hacía entre 5 y 7 horas y tardamos poco más de 3 (probablemente la carretera la hayan arreglado esto últimos años). La minivan que contratamos por 115.000 kip / persona en nuestro alojamiento (Noknoy Guest House, muy fiable) estaba de lujo, nos recogió por la mañana y nos dejó en el centro de Vang Vieng. Hay varias salidas al día y se puede ir también en autobús turístico y en autobús turístico Vip, ambos más caros que la minivan. Suponemos que también podrás coger un autobús local más barato en la lejana estación municipal de Luang Prabang, pero no te podemos decir ni precios ni horarios.

De Vang Vieng fuimos a Vientián en un minibus que tardo cerca de 4 horas (si vas al aeropuerto puedes pedir al conductor que te deje en la carretera frente al aeropuerto). El ticket lo compramos en una de las agencias de la calle principal y pagamos 50.000 kip / persona . El minibus nos recogió en nuestro alojamiento y nos dejó en la zona turística de Vientián. Aunque seguro que hay autobuses locales más baratos, no creemos que merezcan la pena, ya que estos salen de la cercana estación de Vang Vieng y llegan a la lejana estación de Vientian (30 minutos en autobús local desde la estación urbana de Vientián).


TRANSPORTE INTERNO

Para moverte por el pequeño pueblo e ir a la cercana estación no es necesario transporte. El pueblo es feo y no tiene nada, así que para hacer las visitas a las cuevas y moverte por los alrededores necesitarás alquilar una moto (desde 40.000 kip / día la semi-automática y 60.000 kip / día la automática) o una bici de montaña (30.000 kip / día, las julianas mucho menos).


No te recomendamos la bici para nada, ya que las cuevas más chulas están bastante lejos, hace muchísimo calor y la mayoría de los caminos por los que irás están llenos de cantos que te dejarán el culo y los brazos hechos polvo.


ALOJAMIENTO

En el pueblo, en el la calle que baja hacia el río y la perpendicular (alejándote del río) es una sucesión de guest house muy baratas y vacías (aquí se ve el “daño” que ha hecho la prohibición de la droga y el “toque de queda” al turismo de Vang Vieng). Nosotros después de mirar unas cuantas nos quedamos en “Sisabang Guest House” (en la calle perpendicular a la calle que baja al río), habitación doble con baño privado, ventilador, limpio, una castaña de wifi y cafe y te gratis por la mañana por 60.000 kip. En el pueblo probablemente haya muchas mejores.

Nosotros fuimos demasiado perretes y no nos cambiamos, pero vimos que por el mismo precio puedes estar en un bungalow en la otra orilla del río alejado del feísimo pueblo (a 5 minutos andando). Por ejemplo, en “Mailyn Guest House” pagarás 60.000 kip y estarás en medio del campo en un bungalow con baño privado.


COMER BIEN Y ECONÓMICO

Aunque como todo en Vang Vieng está muy enfocado al turismo, hay varios sitios para comer a precios económicos. En la mayoría de restaurantes y puestos callejeros te podrás comer un buen bocatas desde 10.000 kip. El sitio donde más nos gustaron (los desayunábamos, comíamos y a veces cenábamos) fue en un pequeño restaurante sin nombre que encontrarás en la parte derecha de la calle que baja al río, justo al lado del restaurante “Arena”.


El sitio más barato (15.000 – 20.000) y rico que encontramos para comer (platos de noodles y arroz), lo encontrarás en la calle paralela a la calle principal que baja al río (donde están los sitios para tomar copas), muy cerca del “Kangaroo Sunset”. Te dejamos una foto del restaurante sin nombre.


ACTIVIDADES

Llegamos a Vang Vieng con ganas de alquilar un kayak y pasar un día recorriendo el río, parándonos en sitios chulos a comernos nuestro bocata, pegarnos algún bañito... nos pusimos a preguntar y TOMA! la primera en la frente. Si quieres un kayak tendrás que contratar un tour e ir con otros 10 kayaks, probablemente coreanos, chinos y japoneses y todos ellos con al menos un palo de selfie... Además de que este plan no nos llamaba la atención, el precio que nos proponían era desproporcionado.

Otra cosa que puedes hacer es el famoso y aburrido tubing, es decir, bajar un río bastante tranquilo sentado en una cámara de aire de camión... (tardarás 1 hora en época de lluvias y 3 aburridas horas en la temporada seca), puede ser que si lo bajas habiendo tomado un batido de setas alucinógenas (ahora prohibidos) fuese divertido. Alquilar la cámara cuesta 55.000 Kip (a devolver antes de las 18:00) y 60.000 Kip de depósito.



Algo que no hicimos, y que nos quedamos con las ganas, es sobrevolar en globo aerostático los alrededores de Vang Vieng al atardecer. Algo caro para un presupuesto mochilero como el nuestro, 80 USD / persona.

Lo que hicimos nosotros y lo hicimos mal (nos juntamos con un tío de Alicante, egocéntrico, pesado y caprichoso y por tontos nos cambió nuestra ruta y planes y encima nos tocó aguantarle un largo día...), fue una ruta en moto por los bonitos alrededores de Vang Vieng, recorriendo sus polvorientas carreteras y visitando las cuevas de Tham Loup (5.000 kip / persona con linterna), Tham Hoi (5.000 Kip / persona con linterna), Tham Nam (10.000 kip / persona con linterna) y el famoso Blue Lagoon (10.000 kip / persona).


Hay otras muchas cuevas más cercanas, que no fuimos. Para llegar a las que nosotros fuimos hay que coger la carretera N13 en dirección Luang Prabang, a 12 kilómetros del pueblo (a la altura de Nadao) toma el desvío a la izquierda y sigue este camino aproximadamente 1 kilómetro. Una vez llegues al aparcamiento (5.000 kip / moto) y cruces el puente (5.000 kip / persona) te encontrarás una pequeña cueva con un buda enorme tumbado (“Elephant cave”), a partir de aquí se te acercará gente que te quiere hacer de guía y preguntes a quién preguntes nadie te ayudará, es más, han quitado todo tipo de indicaciones, han puesto barreras al camino y creado senderos falsos para que te pierdas. Aunque nos costó, nosotros llegamos sin guía y siguiendo el camino de la derecha (según miras hacia “Elephant cave”) y a 100 metros o así seguimos el primer camino en dirección a las montañas (si está vallado, salta).

De todas formas, aquí más que en ningún sitio, la aplicación “maps.me” es imprescindible. Te tendrás que descargar el mapa de Laos cuando tengas internet y después tendrás un gps completísimo que en ocasiones tiene marcados hasta rutas de trekking (no hace falta internet).


INFORMACIÓN ÚTIL

Aunque cuando nosotros pasamos por la tarde-noche no había ningún control, parece ser que en el puente de construcción que une el pueblo con la otra parte del río (justo el puente que llega al camino que se dirige al “Blue Lagoon”), hay que pagar un peaje incluso si pasas andando. Evítalo cruzando el endeble puente de madera al que llegas directamente si bajas por la calle principal (aunque parezca que se va a caer, las motos pasan por él).


Como sabemos que precios y calidades varían a la velocidad del vértigo, ten en cuenta que pasamos 3 días en Vang Vieng en abril de 2015.